Según se informó, se encuentra en pleno desarrollo en todas las escuelas de la provincia la aplicación de la segunda de las dosis comprendida en la campaña de vacunación contra los el Virus del Papiloma Humano (HPV).
La inmunización apunta a reducir los casos de cáncer de cuello uterino y que fue incorporada al calendario de vacunación de la Argentina, con lo cual es obligatoria y gratuita para las nenas de 11 años.
Desde la esfera de Inmunizaciones del Ministerio de Desarrollo Humano se trabaja de antemano con docentes y los padres a fin de que trasmitan toda la información sobre el particular, además de distribuirse en todas las áreas programáticas las dosis necesarias de acuerdo a la matricula de las escuelas a visitar y donde se vacunaran a las niñas de 11 años. Por supuesto que tiene que haber de antemano la autorización de los padres, e incluso que la madre pueda estar acompañando a sus hijas cuando se les aplique la dosis.
Fue explicado que "el esquema de vacunación es 0-1 y seis meses. Durante octubre cumplimentamos con la primera dosis a toda la población objetivo que son unas 6300 niñas nacidas en el año 2000. La segunda dosis es la que se está aplicando en estos días y la tercera final será en abril de 2012, también visitando las escuelas".
Otro aspecto aludido tuvo que ver con el hecho de que la vacuna se aplica exclusivamente en este campaña a las nenas de 11 años (una edad en la que se supone que todavía no han tenido relaciones sexuales: el HPV se transmite por esa vía), se dará en tres dosis.
También se expuso que esta vacuna fue incorporada al calendario de vacunación de acuerdo a una resolución del Ministerio de Salud. La norma señala que dos de los más de 150 genotipos diferentes de HPV (el 16 y el 18) son los que mayor incidencia tienen en el cáncer de cuello uterino y que más del 80% de las mujeres argentinas habrán tenido algún tipo de infección por VPH antes de cumplir los 50 años (en su mayoría, de "bajo riesgo" porque son serotipos que no conllevan riesgo de cáncer).
Fue revelado asimismo que "las vacunas disponibles tienen un perfil de inmunogenicidad, cobertura y seguridad adecuados" y que el mayor éxito de la vacuna se observa cuando ésta se aplica en la etapa prepubertal. Y destaca que el objetivo de su incorporación al calendario apunta a reducir la incidencia del cáncer cervouterino en el país.
La vacuna en cuestión funciona como preventiva contra la infección por ciertos tipos del virus. Este virus es el responsable de gran parte de los cánceres de cuello uterino: en la Argentina hay 5.000 nuevos casos por año, y las mujeres que lo sufren tienen 47 años en promedio. Porque llegan tarde al diagnóstico y al tratamiento, 2.000 se mueren.
"Con la vacuna incorporada al calendario oficial, vamos a bajar las muertes por cáncer de cuello uterino en 20 años", se sostuvo optimista, aunque de todos modos se aclara que la vacuna será complementaria a los chequeos ginecológicos, que incluyen los ya clásicos tests del Papanicolaou (PAP).
Desde la esfera de Inmunizaciones del Ministerio de Desarrollo Humano se trabaja de antemano con docentes y los padres a fin de que trasmitan toda la información sobre el particular, además de distribuirse en todas las áreas programáticas las dosis necesarias de acuerdo a la matricula de las escuelas a visitar y donde se vacunaran a las niñas de 11 años. Por supuesto que tiene que haber de antemano la autorización de los padres, e incluso que la madre pueda estar acompañando a sus hijas cuando se les aplique la dosis.
Fue explicado que "el esquema de vacunación es 0-1 y seis meses. Durante octubre cumplimentamos con la primera dosis a toda la población objetivo que son unas 6300 niñas nacidas en el año 2000. La segunda dosis es la que se está aplicando en estos días y la tercera final será en abril de 2012, también visitando las escuelas".
Otro aspecto aludido tuvo que ver con el hecho de que la vacuna se aplica exclusivamente en este campaña a las nenas de 11 años (una edad en la que se supone que todavía no han tenido relaciones sexuales: el HPV se transmite por esa vía), se dará en tres dosis.
También se expuso que esta vacuna fue incorporada al calendario de vacunación de acuerdo a una resolución del Ministerio de Salud. La norma señala que dos de los más de 150 genotipos diferentes de HPV (el 16 y el 18) son los que mayor incidencia tienen en el cáncer de cuello uterino y que más del 80% de las mujeres argentinas habrán tenido algún tipo de infección por VPH antes de cumplir los 50 años (en su mayoría, de "bajo riesgo" porque son serotipos que no conllevan riesgo de cáncer).
Fue revelado asimismo que "las vacunas disponibles tienen un perfil de inmunogenicidad, cobertura y seguridad adecuados" y que el mayor éxito de la vacuna se observa cuando ésta se aplica en la etapa prepubertal. Y destaca que el objetivo de su incorporación al calendario apunta a reducir la incidencia del cáncer cervouterino en el país.
La vacuna en cuestión funciona como preventiva contra la infección por ciertos tipos del virus. Este virus es el responsable de gran parte de los cánceres de cuello uterino: en la Argentina hay 5.000 nuevos casos por año, y las mujeres que lo sufren tienen 47 años en promedio. Porque llegan tarde al diagnóstico y al tratamiento, 2.000 se mueren.
"Con la vacuna incorporada al calendario oficial, vamos a bajar las muertes por cáncer de cuello uterino en 20 años", se sostuvo optimista, aunque de todos modos se aclara que la vacuna será complementaria a los chequeos ginecológicos, que incluyen los ya clásicos tests del Papanicolaou (PAP).