La costanera permite apreciar la postal ciudadana y la naturaleza.

Una recorrida por la nueva etapa de la avenida costanera, permite confirmar la particular belleza de la Vuelta Fermosa que atrajo al comandante Luis Jorge Fontana para elegir el sitio donde fundaría la villa que fue el origen de esta ciudad.

Desde el lugar se puede contemplar toda un área poblada de riqueza forestal y vegetal, de riachos y espejos de agua menores y observar una postal completa de la ciudad que se prolonga hasta la grúa amarilla del nuevo puerto.
En realidad, se ha convertido en un paseo inmejorable para la familia formoseña y para quienes llegan de visita a Formosa que está identificada con su río- por el que navegan permanentemente buques y remolcadores de formaciones de portacontenedores- y con la fraternidad que la liga en afectos y paisaje a la ciudad de Alberdi.
Se ha dicho que el sector Norte de la avenida costanera representa para los formoseños una definitiva reconciliación con el río Paraguay, el abrazo virtual a la "Vuelta Fermosa", esa rara curva que se dibuja en esta parte del país y que atrajo al fundador y a las familias pioneras para fundar aquí en 1879 a la actual capital provincial.
De allí que esta obra material tiene una singular connotación afectiva para los habitantes con lo que ello significa para la afirmación de la identidad cultural y la incorporación de un paseo que ahora tendrá una longitud de 5.000 metros y que formaba parte de los sueños y anhelos de los habitantes lugareños y de los turistas.
La obra comprendió, inicialmente, trabajos de refulado muy importantes a punto tal que se concretó un recrecimiento del terraplén de seis metros ubicándolo a cota del ferrocarril, es decir lo suficientemente alta como para soportar la eventualidad de inundaciones.
Además, se construyó un puente de hormigón de 60 metros de longitud sobre el riacho Formosa en reemplazo de la antigua estructura que se precipitó al lecho de citado curso de agua a causa de las inundaciones, con una base firme soportada por pilotes clavados hasta veinte metros de profundidad.
Una vez comprobados los asentamientos naturales en este tipo de rellenos se encaró la segunda de las etapas con la pavimentación de la avenida de doble mano y todo el sistema lumínico con 75 columnas de alumbrado público para calzada y 460 para paseo que es sostenido con tres subestaciones transformadoras de 40 KVA.
A todo esto le suma un local gastronómico y en el extremo norte, en la rotonda final de la costanera, desde donde se puede visualizar la zona urbana de la ciudad paraguaya de Alberdi, allende el río, por lo que también la obra tiene implicancias de fraternidad bilateral.
Otro de los atractivos es una fuente de treinta metros de longitud donde se programan para los fines de semana festivales de aguas danzantes, un show musical con agua, luces y sonido. Es un show para mirarlo y admirarlo.
Junto a la fuente con agua permanente fue ubicada la plataforma con dos mástiles de 35 metros de altura y un peso de 7.000 kilogramos donde se enarbolan las banderas de la Argentina y de Formosa en lo que se convierte en una natural zona de entrada al país en esta ciudad.
El local gastronómico ya fue concesionado recién será habilitado durante este mes ya que se trabaja en su moderno y completo equipamiento para ofrecer un servicio inmejorable a los formoseños y a los visitantes.
Todo esto se completa con un sistema de iluminación inteligente en el puente sobre el riacho Formosa cuya belleza natural junto con una vegetación que recrea un ambiente para la contemplación se suma a otros espacios del paseo que cuenta con sendas peatonales, bici sendas, espacios de juegos y áreas de esparcimiento y espacios la realización de actividades gimnásticas y ejercicios físicos, sobre todo como complemento de los que la adopten como lugar ideal para sus caminatas.
Los espacios verdes cubren casi 15 hectáreas con 11 de taludes parquizados y el resto de la superficie en canteros distribuidos en plazoletas y caminos.
Esos espacios están servidos por el sistema de riego por goteo, apelándose a un equipo de bajo volumen convencional salvo por la utilización de goteros enterrados que obliga a ejecutar un diseño muy particular.
Lo cierto es que Formosa, que por muchos años e inexplicablemente vivió de espaldas al río, cuenta ahora con una de las avenidas costaneras más lindas de la región, con un paseo para las personas de todas las edades que diariamente realizan caminatas ,encuentros familiares o la contemplación del río un aspecto que fue el fundamento de esta idea de que la ciudad se reconciliase con su río, que los habitantes tuviesen el mejor paseo para la recreación y el esparcimiento y que se convierta en una expresión de la identidad cultural propia en un abrazo virtual a la Vuelta Fermosa que determinó la decisión de Fontana de elegirla para fundar la nueva capital del Gran Chaco.
02-11-2011 | Cargada en Sociales - Fuente: Subsecretaría de Comunicación Social