El titular de la COREBE, confió que dicho organismo no quiere que se pierda la visión nacional y del desarrollo en la cuenca argentina por lo que se pensó en pequeñas presas para que se pueda hacer un verdadero aprovechamiento integral.
El ingeniero Edgardo Castellano, presidente del directorio de la Comisión Regional del Río Bermejo, conocida con la sigla de COREBE, reconoció que el organismo está trabajando en un estudio orientado a la recreación de un plan hidroenergético para la alta cuenca argentina, al que considera como la base para comenzar a realizar pequeños y medianos aprovechamientos.
"Esto apunta a aumentar la oferta la oferta de energía hidráulica para el norte del país y al mismo tiempo disponer de agua para el aprovechamiento integral, es decir para riego y el consumo humano de las poblaciones jurisdiccionales", explicó.
Castellano aludía a lo que se pretende ejecutar en determinadas zonas de Salta y Jujuy, con presas medianas a pequeñas cuya localización es lo que se está discutiendo aunque ya se sabe que se trata de poblaciones ubicadas en jurisdicción de tributarios del Bermejo.
"No hay que olvidar que los grandes emprendimientos que se proyectaron en el contexto de la cuenca binacional que Argentina comparte con Bolivia, no han podido avanzar ya sea por una cuestión de financiamiento o de diferencia de criterios entre los especialistas en el tema", señaló.
El titular de la COREBE confió que dicho organismo no quiere que se pierda la visión nacional y del desarrollo en la cuenca argentina por lo que se pensó en pequeñas presas para un verdadero aprovechamiento integral.
"El tema está a nivel de prefactibilidad porque lo que queremos es concluir en los próximos meses con una verdadera identificación de los lugares donde se van a hacer estas pequeñas o medianas presas ", explicó.
Los sedimentos
Al consultársele sobre los volúmenes de sedimento que el Bermejo aporta al sistema Paraná- del Plata, dijo que representa el 70% del total que llega al río de la Plata , más de 100 millones de toneladas por ciclo.
Sobre la posibilidad de que COREBE trabaje en obras que disminuyan el impacto de ese arrastre sedimentario, Castellano reconoce que no existen, todavía, obras de ingeniería que sean capaces de manejarlo.
"Sí hay un plan estratégico que propone un trabajo integral que debería hacerse en toda la cuenca y que incluye hasta cuestiones referidas a la forestación como para atenuar el impacto de los sedimentos, aliviar todo el daño que causa a lo largo y ancho de la cuenca", admitió.
Indicó que ese plan integral contempla acciones para disminuir la producción de sedimentos ya que hay lugares específicos donde se genera la mayoría de ellos, como es el caso de Iruya Pescado, al norte de Orán, Salta, a la que se reconoce como la cuenca más activa en la producción de sedimentos.
Hizo notar que una obra importante que había sido proyectada en Zanja del Tigre no pudo ejecutarse ya que fue imposible solucionarse el problema generado por el manejo de los sedimentos en el lugar y porque su construcción se tornaba inviable desde el punto de vista económico ante ese inconveniente que, sin embargo, no se plantea en la alta cuenca boliviana.
Muchos estudios
El ingeniero Castellano reconoce que son innumerables los estudios realizados por expertos internacionales para buscarle soluciones a este problema del Bermejo así como también que ninguno permitió visualizar una solución concreta.
"Y las soluciones que proponían algunos expertos- añadió- siempre eran inhabilitadas por otros especialistas que decían lo contrario y por eso es que para ese tema específico de los sedimentos no se encontró respuestas".
En cuanto a la visión que tienen los actuales directivos de la COREBE ante esa realidad irreversible en apariencia, reveló que "estamos apuntando a tener obras manejando los sedimentos existentes, buscando convivir con ellos y en los tributarios del cauce mismo del Bermejo lugares donde se puedan hacer obras".
"Esto apunta a aumentar la oferta la oferta de energía hidráulica para el norte del país y al mismo tiempo disponer de agua para el aprovechamiento integral, es decir para riego y el consumo humano de las poblaciones jurisdiccionales", explicó.
Castellano aludía a lo que se pretende ejecutar en determinadas zonas de Salta y Jujuy, con presas medianas a pequeñas cuya localización es lo que se está discutiendo aunque ya se sabe que se trata de poblaciones ubicadas en jurisdicción de tributarios del Bermejo.
"No hay que olvidar que los grandes emprendimientos que se proyectaron en el contexto de la cuenca binacional que Argentina comparte con Bolivia, no han podido avanzar ya sea por una cuestión de financiamiento o de diferencia de criterios entre los especialistas en el tema", señaló.
El titular de la COREBE confió que dicho organismo no quiere que se pierda la visión nacional y del desarrollo en la cuenca argentina por lo que se pensó en pequeñas presas para un verdadero aprovechamiento integral.
"El tema está a nivel de prefactibilidad porque lo que queremos es concluir en los próximos meses con una verdadera identificación de los lugares donde se van a hacer estas pequeñas o medianas presas ", explicó.
Los sedimentos
Al consultársele sobre los volúmenes de sedimento que el Bermejo aporta al sistema Paraná- del Plata, dijo que representa el 70% del total que llega al río de la Plata , más de 100 millones de toneladas por ciclo.
Sobre la posibilidad de que COREBE trabaje en obras que disminuyan el impacto de ese arrastre sedimentario, Castellano reconoce que no existen, todavía, obras de ingeniería que sean capaces de manejarlo.
"Sí hay un plan estratégico que propone un trabajo integral que debería hacerse en toda la cuenca y que incluye hasta cuestiones referidas a la forestación como para atenuar el impacto de los sedimentos, aliviar todo el daño que causa a lo largo y ancho de la cuenca", admitió.
Indicó que ese plan integral contempla acciones para disminuir la producción de sedimentos ya que hay lugares específicos donde se genera la mayoría de ellos, como es el caso de Iruya Pescado, al norte de Orán, Salta, a la que se reconoce como la cuenca más activa en la producción de sedimentos.
Hizo notar que una obra importante que había sido proyectada en Zanja del Tigre no pudo ejecutarse ya que fue imposible solucionarse el problema generado por el manejo de los sedimentos en el lugar y porque su construcción se tornaba inviable desde el punto de vista económico ante ese inconveniente que, sin embargo, no se plantea en la alta cuenca boliviana.
Muchos estudios
El ingeniero Castellano reconoce que son innumerables los estudios realizados por expertos internacionales para buscarle soluciones a este problema del Bermejo así como también que ninguno permitió visualizar una solución concreta.
"Y las soluciones que proponían algunos expertos- añadió- siempre eran inhabilitadas por otros especialistas que decían lo contrario y por eso es que para ese tema específico de los sedimentos no se encontró respuestas".
En cuanto a la visión que tienen los actuales directivos de la COREBE ante esa realidad irreversible en apariencia, reveló que "estamos apuntando a tener obras manejando los sedimentos existentes, buscando convivir con ellos y en los tributarios del cauce mismo del Bermejo lugares donde se puedan hacer obras".