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En un hecho quizás paradójico, las nuevas lluvias que se precipitaron sobre la provincia de Formosa están prácticamente despejando el grave problema de la sequía, pero al mismo tiempo, acompañado por un violento temporal, afectó a unas 300 viviendas y damnificó a unas 2000 personas, quienes fueron rápidamente asistidos por el Gobierno de la Provincia.
Mientras se evalúan los beneficios de las nuevas lluvias que dejan atrás largos meses sin precipitaciones y con cuadros angustiantes de carencia de agua, el Comando de Emergencia del gobierno provincial tienen totalmente controlada la situación de los perjudicados por los vientos huracanados y granizos que castigaron a más de media docena de poblaciones en la noche del lunes y que en menor intensidad, se reiteró anoche. Se distribuyeron entre quienes padecieron el rigor de la naturaleza, alimentos, chapas, colchones, mantas, medicinas y se enviaron equipos sanitarios apenas se conoció la gravedad del meteoro.
El tornado del pasado lunes afectó a pobladores y viviendas de las localidades de Comandante Fontana, Ibarreta, Estanislao del Campo, Pozo del Tigre, Villa General Guemes, Las Lomitas, Sumayen, Misión Pozo Yacaré, Laguna Yema y otros pequeños parajes, quienes recibieron ayuda inmediata.
Consultado acerca de la evolución de la asistencia a afectados y los registros de lluvias caídas en las últimas horas, el comisario general Angel Peña, del Comando de Emergencia,  precisó que la ayuda persiste en beneficio de quienes sufrieron problemas en sus viviendas y están recibiendo los elementos necesarios para que vuelvan a la normalidad, en trabajo coordinado con los municipios de las localidades alcanzadas. Informó que solamente existe un problema en Laguna Yema, que no pudo recibir ayuda a raíz del mal estado de la Ruta Nacional 81, elementos que se encuentran en la localidad de Las Lomitas.

Importantes lluvias, hasta en Pirané
En cuanto a las lluvias, y de acuerdo a los datos proporcionados por Peña, Pirané también ha sido beneficiada con más de 50 milímetros, que se produce cuando la situación era más que acuciante y continuaban la asistencia desde esta capital por diversos métodos. Pirané se encontraba en un proceso de emergencia hídrica que ahora se atempera como consecuencia de las últimas precipitaciones.
Citó casos para magnificar las lluvias y especificó que en La Floresta, al sur provincial, llovió 100 milímetros; en Villa 213, 80; en Comandante Fontana 60; Bartolomé de las Casas 70; General Mosconi 45 y subrayó que las precipitaciones tuvieron lugar en la madrugada de ayer, hasta las 7.
Por ejemplo, en Las Lomitas, las lluvias caídas solamente en noviembre de este año, casi trepa a los 300 Mm. lo que prácticamente pone fin a la prolongada sequía que afectaba a personas, animales y producción, a la que se suma Pirané, otra localidad con serios inconvenientes hídricos.
Empero, se vigila la situación en esta última localidad, por si las lluvias no alcanzaron y si es necesario, continuar con la asistencia mediante los camiones cisternas, como se lo venía haciendo.
A pesar de la violencia de las nuevas tormentas registradas ayer a la madrugada, no se registraron nuevos inconvenientes ni se reportaron casos de afectación de personas ni viviendas, merced a un acelerado trabajo del Comando de Emergencia. En Formosa capital llovió ayer desde las 2 hasta las 7, 53 milímetros, y la que siguió luego hasta media mañana, fue muy ínfima, indicó Peña.
Las fuertes ráfagas de viento de ayer a la madrugada (por espacio de 30 minutos) castigaron severamente a la capital, donde sólo se registraron caídas de árboles, ramas desplomadas y descenso brusco de la tensión de la energía eléctrica y en algunos casos, cortes en el servicio.

La ayuda
La asistencia a los damnificados llegó apenas se conoció la magnitud del meteoro. Se acudió de inmediato con víveres, partidas de alimentos, cuerpo médico con sus auxiliares, colchones, chapas y otros elementos para paliar tan acuciante situación.
Las tareas se coordinaron con los intendentes y así se concurrió en ayuda de quienes perdieron sus viviendas pero que lo están recuperando merced al accionar precisamente de las comunas, que envían a sus operarios a la reconstrucción de las unidades habitacionales afectadas.
Así se pudo observar al intendente de Ibarreta, Rubén Dasso, quién comandó la asistencia a su población y agradeció el gesto del gobernador Gildo Insfrán, quién según sus apreciaciones, se colocó al frente de la situación.  Dasso señaló que la ayuda a los ibarretenses afectados (los que más padecieron el rigor del temporal y la granizada) llegó rápidamente desde la capital, por lo que agradeció la solidaridad y el altruismo que acompañaron al profesionalismo de los responsables.