Las defensas y correderas protegen de las inundaciones a las comunidades.

Destacó el titular de la DPV que estas obras les permite a los pobladores criollos y aborígenes despejar el temor a inundaciones sorpresivas y al mismo tiempo planificar sus vidas ya que con anterioridad nada de lo que emprendido era definitivo por los embates furiosos de la naturaleza.

Durante la reciente gira que realizó el gobernador Insfrán por numerosas comunidades y parajes del departamento Ramón Lista, habitadas en su mayoría por criollos y aborígenes wichí, se le hizo presente el reconocimiento por el efecto favorable que tuvieron las defensas contras las inundaciones y las correderas fluviales construidas y mantenidas por equipos de Vialidad Provincial.
El administrador de la Dirección Provincial de Vialidad, Jorge Jofré, dijo que los pobladores le transmitieron al jefe del Ejecutivo su gratitud porque la tarea que se monitorea de manera constante permite que haya una respuesta inmediata ante el comportamiento errático que plantea el río Pilcomayo.
"Sobre todo le agradecieron al gobernador porque hace ya varios años que se mantienen en sus mismos emplazamientos, algo que no ocurría hace algunos años cuando los desbordes sorpresivos del Pilcomayo arrasaban las comunidades que debieron optar por la emigración y la reubicación en zonas más altas y seguras" manifestó.
Destacó el titular de la DPV que estas obras les permite a los pobladores criollos y aborígenes despejar el temor a inundaciones sorpresivas y al mismo tiempo planificar sus vidas ya que con anterioridad habían tomado conciencia que nada de lo que emprendían sería definitivo porque la naturaleza les había mostrado los efectos de su furia.
"Sin embargo, desde el modelo formoseño se trabajó en una labor delicada de observación y reacción para que haya un trabajo meticuloso que no fuese producto de la voluntad ni el trabajo solamente sino de los resultados de los desafíos que planteaba el ingreso de las aguas. Si bien no siempre ocurría lo mismo, por lo menos se compilaron datos que sirvieron de pautas para un plan de monitoreo que hasta ahora resultó eficaz, aunque a veces el río nos genera sobresaltos", puntualizó.
Reveló Jofré que la cadena defensiva se extienda a lo largo de unos 80 kilómetros de longitud y que las áreas protegidas incluyen, entre otros, a los parajes El Quebracho, El Silencio, San Andrés, Las Cañitas, San Andrés y Nuevo San Martín, entre otros.
"Junto con ello -subrayó- funcionan bien las correderas fluviales y ello permite que las aguas desbordadas se canalicen normalmente hacia el sistema hídrico del bañado La Estrella y que los caudales que eran tan perjudiciales ahora se los pueda manejar para encarar proyectos productivos y para garantizar el consumo humano y animal en forma complementaria con el programa Esmeralda".
Jofré aludió también al excelente estado en que se encuentran los caminos vecinales y la propia ruta provincial 39 del departamento Ramón Lista , en particular el que vincula Ingeniero Juárez con Palmar Largo, El Chorro y María Cristina.
En ese tramo que se caracterizaba por estar cubierto con piedras denominadas "bolas"- que causaban deterioros en las cubiertas de los vehículos- se realizó un trabajo de conservación que consistió en quitar los trozos más grandes y dejar el material pétreo adecuado al que se le sumó un suelo plástico que facilita el mantenimiento regular del camino.
"Durante la gira se registraron algunas lloviznas no obstante lo cual la comitiva se pudo movilizar porque los caminos se encuentran bien consolidados", expresó.
Confirmó Jofré que las necesidades de conservación de los caminos y el mantenimiento de las defensas y las correderas imponen la permanencia de gran cantidad de equipos viales en El Potrillo.
"Toda esta demanda es la que nos llevó a crear al distrito con asiento en El Chorro que está en pleno proceso de instalación", señaló.
20-04-2011 | Cargada en Noticias - Fuente: Subsecretaría de Comunicación Social