Un total cercano al centenar de casas comprende el plan tendiente a avanzar en las soluciones habitacionales para las familias del barrio Namqom, y así se ratificó en un documento acordado ayer entre el Instituto Provincial de la Vivienda y dirigentes aborígenes que residen en ese sector citadino.
El administrador del IPV, Martín Muracciole junto al diputado provincial Jorge Zarza, se reunieron ayer en sede de dicho organismo con un buen número de vecinos aborígenes, muchos de ellos dejando atrás una manifestación planteando justamente que se acelere la construcción de casas, y dejando en claro que "ese fue el motivo real de nuestro pedido, no así de otro grupo que por motivo político sigue protestando, sin importarles que se logró lo querido", expuso Aníbal "Poli" Mendoza.
Lo establecido en el acuerdo es la edificación de soluciones habitacionales a través del plan Mejor Vivir y grupos de viviendas familiares, en el marco de trabajos que darán pronto inicio y estarían terminadas antes de fin de año. Lo convenido comprende a casi un centenar de familias tobas del barrio Namqom, quienes se mostraron satisfechos por entender que "se dio pronta respuesta a lo que pedimos".
El ingeniero Muracciole dijo que "seguimos trabajando fuerte en pos de reducir el déficit habitacional en toda la provincia, y la política en ese sentido abarca a todos por igual, y en este caso especifico de las comunidades aborígenes, están plenamente incluidos en un marco de equidad. En el mismo barrio Namqom saben que es así, por eso uno no entiende ciertas actitudes de gente que desconozca esto y organice protestas, incluso sin medir las consecuencias de poder estar perjudicando a sus propios vecinos".
"El IPV atiende a todos por igual, todo planteo se escucha de manera directa y sin intermediarios, y ellos mismos saben porque hemos conversado sobre el particular, que en las adjudicaciones de las viviendas se dan prioridades, sobre todo a partir de aquellas priorizando familias con varios hijos y de condición humilde", expuso.
Por su parte, el titular del Instituto de Comunidades Aborígenes, Esteban Ramírez insistió en la necesidad de alcanzar acuerdo a través del diálogo, al tiempo de rechazar la decisión de un grupo de aborígenes que han organizado un "piquete" sobre la ruta nacional 11, frente al barrio Namqom, planteando la necesidad de una casa. "En ese corte de ruta hay gente que no tiene nada que ver ahí, que tiene viviendas".
"En este grupo de gente que está en el corte de ruta hay tres situaciones: los que estaban en tierras fiscales a quienes se les hizo la mensura para inscribir los terrenos a su nombre. Hay once casos así que están en la Escribanía Mayor de Gobierno, que se tienen que inscribir en el Registro de la Propiedad Inmueble, Catastro y la Municipalidad. Además hay 17 propietarios fallecidos y por el ICA se iniciaron los juicios sucesorios. Esas dos listas le enviamos al IPV, quien los tiene como postulantes a la vivienda".
Y añadió que "hay un tercer caso de gente que abandonaron los terrenos y se fueron, y otros que compraron terrenos, quienes entregaron los títulos de propiedad en forma inexplicable".
Aclaró que "uno de los requisitos del IPV es que sea el propietario el que esté habitando la vivienda y en esos casos no podemos hacer nada, porque la ley es clara. En todos estos casos, hicimos los trámites y les aclaramos que no podemos darle solución, por una cuestión jurídica" enfatizó.
Aborígenes
De la docena de personas que cortaban la ruta nacional 11, siete decidieron abandonar la misma a partir de lo acordado en esferas del IPV. Aníbal "Poli" Mendoza explicó que la postura de dejar la ruta fue a partir del canal de dialogo con el gobierno y la respuesta a su pedido, "pero sobre todo porque hay sectores que se aprovecharon de la situación y empezaron a operar políticamente".
Expuso que lo convenido, que destacó comenzó a materializarse a partir de la actitud del diputado provincial Jorge Zarza, y se avanzó luego con la Defensoría del Pueblo, y les expuse claramente a mis hermanos que a partir de hoy se retiren de la ruta, porque estamos hablando con las autoridades y avanzando en nuestro pedido. Pero hay algunos hermanos, que están escuchando a los punteros políticos, que no se de donde vienen, eso es lo malo en todo esto porque nada tiene que ver con nuestro planteo que fue respondido", advirtió.
Señaló a "Israel Alegre como uno de los "principales incitadores" a promover y mantener la protesta, más allá de tener respuesta concreta del gobierno. Este es un operador político del cura candidato, mezcla todo y no debe ser así, tenemos el compromiso firmado de la solución de las casas, eso era lo que pedíamos, por eso no hay que confundir las cosas y aprovecharse de esta situación".
Lo establecido en el acuerdo es la edificación de soluciones habitacionales a través del plan Mejor Vivir y grupos de viviendas familiares, en el marco de trabajos que darán pronto inicio y estarían terminadas antes de fin de año. Lo convenido comprende a casi un centenar de familias tobas del barrio Namqom, quienes se mostraron satisfechos por entender que "se dio pronta respuesta a lo que pedimos".
El ingeniero Muracciole dijo que "seguimos trabajando fuerte en pos de reducir el déficit habitacional en toda la provincia, y la política en ese sentido abarca a todos por igual, y en este caso especifico de las comunidades aborígenes, están plenamente incluidos en un marco de equidad. En el mismo barrio Namqom saben que es así, por eso uno no entiende ciertas actitudes de gente que desconozca esto y organice protestas, incluso sin medir las consecuencias de poder estar perjudicando a sus propios vecinos".
"El IPV atiende a todos por igual, todo planteo se escucha de manera directa y sin intermediarios, y ellos mismos saben porque hemos conversado sobre el particular, que en las adjudicaciones de las viviendas se dan prioridades, sobre todo a partir de aquellas priorizando familias con varios hijos y de condición humilde", expuso.
Por su parte, el titular del Instituto de Comunidades Aborígenes, Esteban Ramírez insistió en la necesidad de alcanzar acuerdo a través del diálogo, al tiempo de rechazar la decisión de un grupo de aborígenes que han organizado un "piquete" sobre la ruta nacional 11, frente al barrio Namqom, planteando la necesidad de una casa. "En ese corte de ruta hay gente que no tiene nada que ver ahí, que tiene viviendas".
"En este grupo de gente que está en el corte de ruta hay tres situaciones: los que estaban en tierras fiscales a quienes se les hizo la mensura para inscribir los terrenos a su nombre. Hay once casos así que están en la Escribanía Mayor de Gobierno, que se tienen que inscribir en el Registro de la Propiedad Inmueble, Catastro y la Municipalidad. Además hay 17 propietarios fallecidos y por el ICA se iniciaron los juicios sucesorios. Esas dos listas le enviamos al IPV, quien los tiene como postulantes a la vivienda".
Y añadió que "hay un tercer caso de gente que abandonaron los terrenos y se fueron, y otros que compraron terrenos, quienes entregaron los títulos de propiedad en forma inexplicable".
Aclaró que "uno de los requisitos del IPV es que sea el propietario el que esté habitando la vivienda y en esos casos no podemos hacer nada, porque la ley es clara. En todos estos casos, hicimos los trámites y les aclaramos que no podemos darle solución, por una cuestión jurídica" enfatizó.
Aborígenes
De la docena de personas que cortaban la ruta nacional 11, siete decidieron abandonar la misma a partir de lo acordado en esferas del IPV. Aníbal "Poli" Mendoza explicó que la postura de dejar la ruta fue a partir del canal de dialogo con el gobierno y la respuesta a su pedido, "pero sobre todo porque hay sectores que se aprovecharon de la situación y empezaron a operar políticamente".
Expuso que lo convenido, que destacó comenzó a materializarse a partir de la actitud del diputado provincial Jorge Zarza, y se avanzó luego con la Defensoría del Pueblo, y les expuse claramente a mis hermanos que a partir de hoy se retiren de la ruta, porque estamos hablando con las autoridades y avanzando en nuestro pedido. Pero hay algunos hermanos, que están escuchando a los punteros políticos, que no se de donde vienen, eso es lo malo en todo esto porque nada tiene que ver con nuestro planteo que fue respondido", advirtió.
Señaló a "Israel Alegre como uno de los "principales incitadores" a promover y mantener la protesta, más allá de tener respuesta concreta del gobierno. Este es un operador político del cura candidato, mezcla todo y no debe ser así, tenemos el compromiso firmado de la solución de las casas, eso era lo que pedíamos, por eso no hay que confundir las cosas y aprovecharse de esta situación".