Con los 22 audífonos entregados ayer a personas con problemas de sordera, se cuantifican en casi medio millar los niños y adultos que en los últimos cinco años pudieron recuperar su capacidad auditiva.
Mediante estas acciones incluso varias de estas personas desarrollaron el lenguaje, merced a un programa que el gobierno viene llevando a cabo y que al beneficiario no le cuesta un solo peso.
Ayer por la mañana, el ministro de Desarrollo Humano, Aníbal Gómez, encabezó un acto de entrega de 22 audífonos para 16 pacientes, entre niños y adultos, el cual se desarrollo en el Hospital de la Madre y el Niño, junto a los beneficiados y sus familiares, además de médicos otorrinolaringólogos y fonoaudiólogas que trabajan en el programa.
Se tratan de audífonos digitales de avanzada , incluso una de las niñas beneficiadas, que reside en Mojón de Fierro, como no tiene desarrollada sus orejas, esa parte externa del aparato auditivo es cubierta por un audífono de características particulares que está adherido a una especie de vincha que permite se sostenga el equipo en el lugar adecuado.
El ministro Gómez expuso justamente que este programa que se desarrolla desde el 2005, permitió a la fecha entregar un total de 443 audífonos a gente de esta capital e interior. Dejó en claro que se les provee sin cargo alguno y con el entrenamiento adecuado para su correcto uso, y si tenemos en cuenta que el valor promedio de cada uno de estos aparatos es de $ 5000, incluso hay casos que deben tener en ambos oídos por lo que se debe duplicar la cifra, se tiene una idea de su importancia en todo sentido.
Indicó que se cuenta con todos los equipos necesarios y remarcó que se encara una etapa de entrenamiento de personal especializado "porque son aparatos muy sofisticados que permiten que a las 72 horas del nacimiento del bebé, se les puede realizar las otoemisiones acústicas y que determina si ese chico padece o no problemas de sordera".
Subrayó que los equipamientos permiten la detección precoz de la sordera y especificó que en un plazo muy corto al nacimiento, ya comienza el tratamiento para el menor con este problema hasta lograr que sea una persona normal.
Gómez expresó que de esta manera, se evita esperar dos, tres o cuatro años, o bien cuando el menor ingresa a la escuela, para abocarse a la solución y sacarlo al chico de la sordera. "Con este método, nosotros pretendemos que si se le detecta sordera a los tres días de haber nacido, a los seis meses, comenzar con el tratamiento que lo podemos desarrollar con audífonos, implantes con tecnologías muy de punta".
Conectado al mundo exterior
"Se trata de un programa de profundo contenido social, ya que permite rehabilitar a los pacientes hipoacúsicos o con sordera, y el hecho de que puedan escuchar permite también muchas veces que desarrollen el lenguaje. Es que cuando la hipoacusia se detecta tardíamente, por ejemplo cuando va a la escuela a los 4 o 5 años, y su lenguaje no esta desarrollado, y asistirlo con un audífono en ese momento implica desarrollar todo un arduo trabajo posterior de rehabilitación, y resulta mucho más sencillo tratarlo tempranamente", expuso.
Tras la entrega, colocación y prueba de los elementos que otorga la posibilidad de escuchar a las personas, el ministro Gómez indicó que "es muy plausible porque se le devuelve al chiquito o a un adulto la posibilidad de la audición y eso se nota en el rostro de cada uno de ellos, reflejando mucha felicidad, cuando al colocarles el audífonos se conecta con el mundo exterior y empieza a escuchar. Esto es lo meritorio de este programa que hace muchos años el gobierno provincial lo viene sosteniendo. El beneficio alcanza además a los adultos mayores, que de esta manera recupera la posibilidad de comunicación con su entorno, con quienes cotidianamente lo rodean y con otras personas", expresó.
"El hecho de estar todo el día excluido de la posibilidad de contacto y sin posibilidades de transmitir sus vivencias, sumerge al individuo en un cuadro de depresión. Ahora, con estos elementos, van a encontrar una mejor condición de vida" dijo en otro momento de la ceremonia, ante la presencia de padres y tutores.
Significó el contenido del programa porque según sostuvo, el chico, equipado a esa edad con estos tratamientos, se torna en una persona normal. Ingresa a las escuelas normalmente, se conecta con el resto, consigue trabajo, practica deportes, etc. y deja de ser un discapacitado e inicia una vida absolutamente igual al resto", subrayó.
Con frecuencia se pasa por alto la importancia de una audición clara y completa, cuando la capacidad auditiva se ve disminuida, la comunicación se interrumpe constantemente, genera estrés, y en muchas ocasiones aislamiento, además de que muchos sonidos cotidianos que nos envuelven simplemente dejan de existir en nuestra experiencia.
El poder escuchar mejor le devuelve gran intensidad a la vida de quien padece algún tipo de padecimiento auditivo, le permite integrarse con naturalidad a las conversaciones, advertir las necesidades de un bebé que llora, escuchar un grito de precaución en la calle, escuchar música, e incluso sonidos que ya tiene olvidados.
Ayer por la mañana, el ministro de Desarrollo Humano, Aníbal Gómez, encabezó un acto de entrega de 22 audífonos para 16 pacientes, entre niños y adultos, el cual se desarrollo en el Hospital de la Madre y el Niño, junto a los beneficiados y sus familiares, además de médicos otorrinolaringólogos y fonoaudiólogas que trabajan en el programa.
Se tratan de audífonos digitales de avanzada , incluso una de las niñas beneficiadas, que reside en Mojón de Fierro, como no tiene desarrollada sus orejas, esa parte externa del aparato auditivo es cubierta por un audífono de características particulares que está adherido a una especie de vincha que permite se sostenga el equipo en el lugar adecuado.
El ministro Gómez expuso justamente que este programa que se desarrolla desde el 2005, permitió a la fecha entregar un total de 443 audífonos a gente de esta capital e interior. Dejó en claro que se les provee sin cargo alguno y con el entrenamiento adecuado para su correcto uso, y si tenemos en cuenta que el valor promedio de cada uno de estos aparatos es de $ 5000, incluso hay casos que deben tener en ambos oídos por lo que se debe duplicar la cifra, se tiene una idea de su importancia en todo sentido.
Indicó que se cuenta con todos los equipos necesarios y remarcó que se encara una etapa de entrenamiento de personal especializado "porque son aparatos muy sofisticados que permiten que a las 72 horas del nacimiento del bebé, se les puede realizar las otoemisiones acústicas y que determina si ese chico padece o no problemas de sordera".
Subrayó que los equipamientos permiten la detección precoz de la sordera y especificó que en un plazo muy corto al nacimiento, ya comienza el tratamiento para el menor con este problema hasta lograr que sea una persona normal.
Gómez expresó que de esta manera, se evita esperar dos, tres o cuatro años, o bien cuando el menor ingresa a la escuela, para abocarse a la solución y sacarlo al chico de la sordera. "Con este método, nosotros pretendemos que si se le detecta sordera a los tres días de haber nacido, a los seis meses, comenzar con el tratamiento que lo podemos desarrollar con audífonos, implantes con tecnologías muy de punta".
Conectado al mundo exterior
"Se trata de un programa de profundo contenido social, ya que permite rehabilitar a los pacientes hipoacúsicos o con sordera, y el hecho de que puedan escuchar permite también muchas veces que desarrollen el lenguaje. Es que cuando la hipoacusia se detecta tardíamente, por ejemplo cuando va a la escuela a los 4 o 5 años, y su lenguaje no esta desarrollado, y asistirlo con un audífono en ese momento implica desarrollar todo un arduo trabajo posterior de rehabilitación, y resulta mucho más sencillo tratarlo tempranamente", expuso.
Tras la entrega, colocación y prueba de los elementos que otorga la posibilidad de escuchar a las personas, el ministro Gómez indicó que "es muy plausible porque se le devuelve al chiquito o a un adulto la posibilidad de la audición y eso se nota en el rostro de cada uno de ellos, reflejando mucha felicidad, cuando al colocarles el audífonos se conecta con el mundo exterior y empieza a escuchar. Esto es lo meritorio de este programa que hace muchos años el gobierno provincial lo viene sosteniendo. El beneficio alcanza además a los adultos mayores, que de esta manera recupera la posibilidad de comunicación con su entorno, con quienes cotidianamente lo rodean y con otras personas", expresó.
"El hecho de estar todo el día excluido de la posibilidad de contacto y sin posibilidades de transmitir sus vivencias, sumerge al individuo en un cuadro de depresión. Ahora, con estos elementos, van a encontrar una mejor condición de vida" dijo en otro momento de la ceremonia, ante la presencia de padres y tutores.
Significó el contenido del programa porque según sostuvo, el chico, equipado a esa edad con estos tratamientos, se torna en una persona normal. Ingresa a las escuelas normalmente, se conecta con el resto, consigue trabajo, practica deportes, etc. y deja de ser un discapacitado e inicia una vida absolutamente igual al resto", subrayó.
Con frecuencia se pasa por alto la importancia de una audición clara y completa, cuando la capacidad auditiva se ve disminuida, la comunicación se interrumpe constantemente, genera estrés, y en muchas ocasiones aislamiento, además de que muchos sonidos cotidianos que nos envuelven simplemente dejan de existir en nuestra experiencia.
El poder escuchar mejor le devuelve gran intensidad a la vida de quien padece algún tipo de padecimiento auditivo, le permite integrarse con naturalidad a las conversaciones, advertir las necesidades de un bebé que llora, escuchar un grito de precaución en la calle, escuchar música, e incluso sonidos que ya tiene olvidados.