Con un inocultable optimismo respecto del futuro de los países de América Latina y sobre todo de la consolidación de la Unión de Naciones del Sur, el gobernador Gildo Insfrán resaltó el primer encuentro que sostuvieron en la Casa Rosada las presidentas de la Argentina y Brasil.
Sobre todo, el mandatario resalta el ánimo mutuo de las dos jefas de estad, Cristina Fernández de Kirchner y Dilma Roussef, de considerar estratégica la vinculación de ambos países para fortalecer definitivamente la integración, la cooperación y las relaciones entre las naciones del continente sudamericano.
En ese sentido, ponderó las expresiones de la visitante cuando atribuyó a Néstor Kirchner y su antecesor, Luiz Inacio Lula Da Silva, el formidable cambio registrado en las relaciones entre los dos principales estados continentales.
Insfrán -quien a través del ejercicio de la presidencia de CRECENA Litoral y del vínculo permanente con los cuatro estados del sur brasileño integrados en el CODESUL que permitió que la subregiones de ambos países consiguieran encarar obras y tomar medidas de mutuo beneficio para sus pueblos- mencionó como relevante el compromiso expresado por la ilustre visitante de desplegar con el gobierno argentino una política conjunta en la estrategia de desarrollo de la región que debe manifestarse en todas las áreas de interés de ambos países.
La sucesora de Lula manifestó su deseo de tener una relación extremadamente estrecha con Cristina porque Brasil y la Argentina son países que tienen responsabilidades ante el conjunto de América latina en el sentido de hacer que nuestra región tenga cada vez más presencia en el escenario internacional.
Interpreta que esa presencia articulada con líderes que son mujeres también permitirá una presencia mayor en los órganos de articulación internacional, para resaltar Rousseff el liderazgo de Argentina en el G-77, y dijo que esa posición en el grupo de los países en vías de desarrollo al estimar que ello facilitará la defensa de los intereses de los países del Sur.
En ese sentido, ponderó las expresiones de la visitante cuando atribuyó a Néstor Kirchner y su antecesor, Luiz Inacio Lula Da Silva, el formidable cambio registrado en las relaciones entre los dos principales estados continentales.
Insfrán -quien a través del ejercicio de la presidencia de CRECENA Litoral y del vínculo permanente con los cuatro estados del sur brasileño integrados en el CODESUL que permitió que la subregiones de ambos países consiguieran encarar obras y tomar medidas de mutuo beneficio para sus pueblos- mencionó como relevante el compromiso expresado por la ilustre visitante de desplegar con el gobierno argentino una política conjunta en la estrategia de desarrollo de la región que debe manifestarse en todas las áreas de interés de ambos países.
La sucesora de Lula manifestó su deseo de tener una relación extremadamente estrecha con Cristina porque Brasil y la Argentina son países que tienen responsabilidades ante el conjunto de América latina en el sentido de hacer que nuestra región tenga cada vez más presencia en el escenario internacional.
Interpreta que esa presencia articulada con líderes que son mujeres también permitirá una presencia mayor en los órganos de articulación internacional, para resaltar Rousseff el liderazgo de Argentina en el G-77, y dijo que esa posición en el grupo de los países en vías de desarrollo al estimar que ello facilitará la defensa de los intereses de los países del Sur.