La Asociación “Formosa Solidaria” que encabeza el diputado provincial justicialista Jorge Oscar Ibáñez, habilitó en el barrio San Agustín de esta capital, un interesante emprendimiento de cría de conejos con fines alimenticios y sociales.
La Asociación “Formosa Solidaria” que encabeza el diputado provincial justicialista Jorge Oscar Ibáñez, habilitó en el barrio San Agustín de esta capital, un interesante emprendimiento de cría de conejos con fines alimenticios y sociales.
La finca, el Primer Centro de Multiplicación de Cunicultura, situada en dos viviendas familiares del mencionado barrio, cuenta ya con más de 100 ejemplares de conejos en sus distintas etapas de vida y su intención es inculcar su cría para aprovechamiento alimentario y social.
Las responsables de la tarea comunitaria, entre otras, Gregoria Fleitas y Celeste Benítez, se refirieron al tema e indicaron que merced al convenio firmado con el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) surgió la iniciativa y pusieron en marcha el microemprendimiento productivo. “El objetivo es criar conejos en cautiverio para el consumo de su carne que es muy preciada. Es un enorme desafío que ponemos en marcha dentro de la población formoseña, que necesita que se creen nuevos hábitos de alimentación y eso nos permitirá que nuestras familias en los centros comunitarios comiencen a probar la carne de conejo”.
Señalaron ambas que la carne de conejo es muy rica en proteínas, están libres de colesterol “y sobre todo, es barato criarlos y tenerlos en casa”.
Al acto de presentación de este emprendimiento asistieron los diputados provinciales Daniel Colcombet, Sandra Moreno, Lilian Bistolfi, el titular de Asuntos Juveniles de la provincia, Fernando Colcombet, el subsecretario del área que vela por los intereses del consumidor, Edgar Pérez, la concejal Blanca Denis, trabajadores sociales como Juan Carlos Ducca e invitados especiales.
Las responsables de este pequeño emprendimiento informaron acerca de la forma en que se crían los conejos, las propiedades de su carne y el proyecto que se pretende volcar a favor de la comunidad barrial, a través de la cría de estos conejos para fines alimenticios y comunitarios.
Destacaron que la idea es multiplicar los conocimientos acerca de los beneficios que implica la cría de conejos y el aprovechamiento de su carne muy rica en propiedades y sin mucho costo. Señalaron que se trasladarán los conocimientos y beneficios a todos los barrios capitalinos, con el fin de propender a su consumo y la cría al tiempo que se recrea el hábito del trabajo.