El director Nacional de Emergencias Sanitarias (DINESA), Gabriel Ive, viajó hasta Formosa a efectos de colaborar con las autoridades sanitarias locales en lo que se requiera para atender la emergencia derivada del temporal en Pozo del Tigre.
Dijo que al recorrer la zona pudo apreciar la magnitud de los daños que dejó el fenómeno natural, y también "el importante despliegue de tareas para asistir a los damnificados, y realmente se notó que se pudo mitigar el trance y, lo más importante, se atenuó todo el caos que produce este tipo de eventos sobre la gente. Realmente debo felicitar por la gran planificación de la que disponen, de otra manera no se hubiera tenido una respuesta tan inmediata como eficiente".
Aludió a que en la recorrida por la zona junto al ministro de Gobierno, Justicia y Trabajo, Jorge Abel González, observaron las acciones de ayuda, y marcó como otro hecho positivo el haber podido reducir ostensiblemente el número de personas que estaban en los refugios, y también los pocos pacientes internados que entre los que están en el hospital de Pozo del Tigre, Las Lomitas y de la ciudad capital son seis.
Aludió a que la violencia del evento es comparable al ocurrido en San Pedro, provincia de Misiones, aunque en este caso con el agravante de que la densidad poblacional de la localidad formoseña es muchísimo mayor, aunque el hecho de que las casas en la comunidad misionera eran casi todas de madera, hizo que la destrucción de las mismas fuera más importante respecto a la población de Formosa donde priman las viviendas de material.
De todos modos marcó que "al ver los grandes hierros retorcidos arrancados con su base, uno se da cuenta de lo tremendo que fue todo, y desgraciadamente han muerto cuatro personas, no es una simpleza, ha sido algo trágico".
Aludió a que había remitido al ministro de Salud de la Nación, Juan Manzur, la evaluación de daños y necesidades, "y ya se tomó nota y por ejemplo se produjo un refuerzo en el envío de medicamentos del programa Remediar, como también un millar de pastillas potabilizadoras de agua, aunque el despliegue sanitario es muy bueno, no obstante estamos a disposición de lo que podamos aportar por lo que el contacto se mantendrá con las autoridades locales en forma permanente".
Indicó Ive que "ahora se viene la fase de la reconstrucción, lo que conlleva acciones muy importantes, ya que se trata de que toda la comunidad vuelva a su vida normal".
Dijo que el buen status en el cumplimiento del calendario de vacunas hace que no sea necesario hacer ningún tipo de refuerzo, algo que por ahí si se da cuando se tratan de inundaciones, aunque sí señaló que se deberán reforzar algunos medicamentos para atender por ejemplo patologías especificas como problemas de piel.
Aludió a que en la recorrida por la zona junto al ministro de Gobierno, Justicia y Trabajo, Jorge Abel González, observaron las acciones de ayuda, y marcó como otro hecho positivo el haber podido reducir ostensiblemente el número de personas que estaban en los refugios, y también los pocos pacientes internados que entre los que están en el hospital de Pozo del Tigre, Las Lomitas y de la ciudad capital son seis.
Aludió a que la violencia del evento es comparable al ocurrido en San Pedro, provincia de Misiones, aunque en este caso con el agravante de que la densidad poblacional de la localidad formoseña es muchísimo mayor, aunque el hecho de que las casas en la comunidad misionera eran casi todas de madera, hizo que la destrucción de las mismas fuera más importante respecto a la población de Formosa donde priman las viviendas de material.
De todos modos marcó que "al ver los grandes hierros retorcidos arrancados con su base, uno se da cuenta de lo tremendo que fue todo, y desgraciadamente han muerto cuatro personas, no es una simpleza, ha sido algo trágico".
Aludió a que había remitido al ministro de Salud de la Nación, Juan Manzur, la evaluación de daños y necesidades, "y ya se tomó nota y por ejemplo se produjo un refuerzo en el envío de medicamentos del programa Remediar, como también un millar de pastillas potabilizadoras de agua, aunque el despliegue sanitario es muy bueno, no obstante estamos a disposición de lo que podamos aportar por lo que el contacto se mantendrá con las autoridades locales en forma permanente".
Indicó Ive que "ahora se viene la fase de la reconstrucción, lo que conlleva acciones muy importantes, ya que se trata de que toda la comunidad vuelva a su vida normal".
Dijo que el buen status en el cumplimiento del calendario de vacunas hace que no sea necesario hacer ningún tipo de refuerzo, algo que por ahí si se da cuando se tratan de inundaciones, aunque sí señaló que se deberán reforzar algunos medicamentos para atender por ejemplo patologías especificas como problemas de piel.