Se anticipó que está proyectado ejecutar otras 200 viviendas más en esta nueva urbanizacion donde ya se están terminando de construir 350 viviendas, la mayoría de ellas ya habilitadas y habitadas por familias que antes ocupaban precarias casillas en lotes ajenos y sin servicios básicos.
De manera sostenida se va consolidando la nueva urbanización en la zona norte de la ciudad (El Porvenir), a través de la ejecución de una serie de obras que en forma conjunta viene ejecutando el gobierno provincial y el municipio capitalino, con una activa participación de vecinos y cooperativas de ladrilleros y carpinteros de ese sector norte de la ciudad.
Sobre el particular, el ministro de Planificación, Inversión, Obras y Servicios Públicos, Jorge Ibáñez, quién estuvo el fin de semana en ese lugar acompañando los festejos a los niños del lugar, expuso que "se trata de un barrio muy especial este de El Porvenir donde se están terminando de construir 350 viviendas, en la mayoría de ellas ya habilitadas se encuentran habitadas por familias que antes ocupaban precarias casillas en lotes ajenos y sin los servicios básicos", anticipando que "está proyectado ejecutar otras 200 más".
Indicó que esta iniciativa de "brindar un techo digno" a las familias de escasos recursos se inicio hace más de un año bajo el sistema de auto-construcción y luego a través de una cooperativa de gente desocupada y que a la fecha aglutina a más de un centenar de trabajadores, se fue fortaleciendo el proceso de ejecución de las casas, dado que si bien el modelo primario se mantiene, hay casos de madres solteras que no pueden encargarse de la dura labor de albañilería por lo que intervienen los cooperativistas de la construcción.
Aludió Ibáñez que este equipo de gente que conforma esta cooperativa seguirá con su activa labor no sólo en El Porvenir, dado que el municipio está preparando un terreno en la zona del San Antonio donde desarrollará un programa similar de núcleos habitacionales.
Significó el ministro que todo el esquema adoptado en este sector de la ciudad tiene un positivo impacto en varias facetas, mucho más allá de la solución habitacional, dado que en lo laboral posibilita que cooperativas de ladrilleros y consorcio de carpinteros radicados en esa misma zona norte de la ciudad puedan colocar su producción .
Se explicó que este innovador esquema se gestó luego de que se materializara la adjudicación en venta de más de 300 parcelas a familias de lo que era el asentamiento contiguo al barrio El Porvenir y que ya se erige como parte de esa misma urbanización y disponiendo de todos los servicios. A partir de entonces comenzó a progresar el proyecto diseñado para la urbanización de todo el sector, como el sistema de auto-construcción de los módulos habitacionales y también el de dotar de todos los servicios a las familias radicadas allí.
Varios de los beneficiarios destacaron el progresivo desarrollo de otras obras en ese sector de la ciudad, que les posibilitó acceder a la energía eléctrica y el agua potable, además de disponer cerca de sus hogares centros de salud, escuelas, servicio de transporte, etc., con lo cual "nos han recreado las condiciones dignas para que podamos desarrollarnos y vivir con dignidad".
"Está dejando de ser un asentamiento y estructurándose como un barrio más dentro de la ciudad, en el marco de un proceso de cambio tendiente a mejorarle la calidad de vida a la gente", significó.
Fue ponderado la manera efectiva en que se está dando este proceso de articulación entre el gobierno provincial con el municipal, además de la activa labor de los dirigentes comunitarios para lograr la transformación deseada en este sitio habitado por familias que requerían una solución habitacional.
Otro aspecto que se explicó es que a cada familia se le adjudicó un lote de 10x30 metros, para luego iniciar el proceso de autoconstrucción de los módulos habitacionales, a quienes además se les proveyó de los materiales e insumos para ello.
Sobre el particular, el ministro de Planificación, Inversión, Obras y Servicios Públicos, Jorge Ibáñez, quién estuvo el fin de semana en ese lugar acompañando los festejos a los niños del lugar, expuso que "se trata de un barrio muy especial este de El Porvenir donde se están terminando de construir 350 viviendas, en la mayoría de ellas ya habilitadas se encuentran habitadas por familias que antes ocupaban precarias casillas en lotes ajenos y sin los servicios básicos", anticipando que "está proyectado ejecutar otras 200 más".
Indicó que esta iniciativa de "brindar un techo digno" a las familias de escasos recursos se inicio hace más de un año bajo el sistema de auto-construcción y luego a través de una cooperativa de gente desocupada y que a la fecha aglutina a más de un centenar de trabajadores, se fue fortaleciendo el proceso de ejecución de las casas, dado que si bien el modelo primario se mantiene, hay casos de madres solteras que no pueden encargarse de la dura labor de albañilería por lo que intervienen los cooperativistas de la construcción.
Aludió Ibáñez que este equipo de gente que conforma esta cooperativa seguirá con su activa labor no sólo en El Porvenir, dado que el municipio está preparando un terreno en la zona del San Antonio donde desarrollará un programa similar de núcleos habitacionales.
Significó el ministro que todo el esquema adoptado en este sector de la ciudad tiene un positivo impacto en varias facetas, mucho más allá de la solución habitacional, dado que en lo laboral posibilita que cooperativas de ladrilleros y consorcio de carpinteros radicados en esa misma zona norte de la ciudad puedan colocar su producción .
Se explicó que este innovador esquema se gestó luego de que se materializara la adjudicación en venta de más de 300 parcelas a familias de lo que era el asentamiento contiguo al barrio El Porvenir y que ya se erige como parte de esa misma urbanización y disponiendo de todos los servicios. A partir de entonces comenzó a progresar el proyecto diseñado para la urbanización de todo el sector, como el sistema de auto-construcción de los módulos habitacionales y también el de dotar de todos los servicios a las familias radicadas allí.
Varios de los beneficiarios destacaron el progresivo desarrollo de otras obras en ese sector de la ciudad, que les posibilitó acceder a la energía eléctrica y el agua potable, además de disponer cerca de sus hogares centros de salud, escuelas, servicio de transporte, etc., con lo cual "nos han recreado las condiciones dignas para que podamos desarrollarnos y vivir con dignidad".
"Está dejando de ser un asentamiento y estructurándose como un barrio más dentro de la ciudad, en el marco de un proceso de cambio tendiente a mejorarle la calidad de vida a la gente", significó.
Fue ponderado la manera efectiva en que se está dando este proceso de articulación entre el gobierno provincial con el municipal, además de la activa labor de los dirigentes comunitarios para lograr la transformación deseada en este sitio habitado por familias que requerían una solución habitacional.
Otro aspecto que se explicó es que a cada familia se le adjudicó un lote de 10x30 metros, para luego iniciar el proceso de autoconstrucción de los módulos habitacionales, a quienes además se les proveyó de los materiales e insumos para ello.