La Subsecretaría de Cultura de la Provincia de Formosa, informa que el próximo viernes 9 de diciembre, a partir de las 20:00 hs, darán inicio las actividades de la Cantata Navideña "Formosa en Navidad".
Las actividades se desarrollarán en el Pesebre Gigante Comunitario de la Plazoleta de la Cruz del Norte, monumental recreación de nacimiento de Nuestro Señor Jesús.
Esta iniciativa, considerada como el pesebre más grande de la Región del Nordeste Argentino y uno de los más imponentes de todo el país, es símbolo de nuestra Navidad y al mismo tiempo vislumbra una connotación simbólica trascendental en la tradición de nuestro pueblo.
Desde el área de cultura se invita a todos los formoseños a reunirnos, pueblo y autoridades, para recordar este momento de fe, profundamente arraigada en nuestra comunidad y que es además una propuesta para unir a las familias.
Juntos podremos apreciar las figuras de animales mansos, de humildes pastores, de la sencillez del lugar y la luz de una estrella no hace más que estremecer el corazón al pensar la sencillez en que Dios llegó al mundo y al mismo tiempo nos muestra como Dios, en medio de su potencia y magnitud, se nos presenta de manera sencilla, en la figura de un frágil niño.
De una mujer, María, la Madre del Señor que lo cuidó y lo acompañó hasta el final, en un claro gesto de puro amor maternal y de servicio sin obstáculos ni objeciones. A José Padre fiel, creyente y protector de Cristo en sus primeros años de vida. Padre de corazón amoroso y lleno de fe para aceptar lo que Dios le pidió.
Esta iniciativa, considerada como el pesebre más grande de la Región del Nordeste Argentino y uno de los más imponentes de todo el país, es símbolo de nuestra Navidad y al mismo tiempo vislumbra una connotación simbólica trascendental en la tradición de nuestro pueblo.
Desde el área de cultura se invita a todos los formoseños a reunirnos, pueblo y autoridades, para recordar este momento de fe, profundamente arraigada en nuestra comunidad y que es además una propuesta para unir a las familias.
Juntos podremos apreciar las figuras de animales mansos, de humildes pastores, de la sencillez del lugar y la luz de una estrella no hace más que estremecer el corazón al pensar la sencillez en que Dios llegó al mundo y al mismo tiempo nos muestra como Dios, en medio de su potencia y magnitud, se nos presenta de manera sencilla, en la figura de un frágil niño.
De una mujer, María, la Madre del Señor que lo cuidó y lo acompañó hasta el final, en un claro gesto de puro amor maternal y de servicio sin obstáculos ni objeciones. A José Padre fiel, creyente y protector de Cristo en sus primeros años de vida. Padre de corazón amoroso y lleno de fe para aceptar lo que Dios le pidió.