Hace
un año dábamos los primeros pasos
para la edición de esta publicación cultural
con muchísimas expectativas. Al igual que hoy vivíamos
en un tiempo especial del año, cuando los sentimientos
positivos del corazón afloran con mayor claridad.
El aire, como en estos días, estaba impregnado
de olores muy nuestros; con las flores de caranda´y,
de las bovedillas que abrigan los pesebres de cada hogar
formoseño. Las flores de coco que adornan los nacimientos
con herencias de raigambre guaraní y los aromas
del caraguatá o chaguar florecido que perfuman
los de reminiscencias criollas de nuestro oeste. Completándose
con los perfumes de las frutas de estación; la
menta, el laurel y la albahaca.
Nacimos como revista en un tiempo particularmente
nuestro… Muy cerca de la Navidad. Fuimos arrancando
una a una las hojas del calendario 2.005, después
de vivir cada día este año del Cincuentenario
de nuestra existencia como Estado Provincial autónomo.
Revalorando nuestra historia con festejos, celebraciones
y reencuentros. Un coloquio de tiempos que pasaron y tiempos
por venir; y un presente concretando la dignidad del hombre,
donde la vida, el trabajo y la construcción del
mañana se conjugan precedidos por el artículo
de primera persona plural: Nosotros…
Fue un buen año. El año
del Cincuentenario; el año del agua; el año
de la Ley de Educación; el año de la ruta
81, de la ruta 28 y la verdad del Bañado La Estrella,
regando de vida a pueblos sedientos. Un año de
afianzamientos y toma de decisiones que el pueblo revalidó
irrevocablemente como soberano de la democracia.
Y una vez más estamos en la estación
del amor; un tiempo de balances y agradecimientos al Niño
Dios que va a volver nacer. Los que habitamos esta tierra
tenemos mucho por dar gracias, y lo vamos a hacer compartiendo
este tiempo entre todos, porque sabemos ser hermanos en
la fe y la esperanza. Vamos a trabajar por otro buen año,
apuntalando con sudor y sacrificio este Modelo que tenemos
en marcha. Vamos a compartir nuestras bendiciones como
cristianos verdaderos. Dios nos permita vivir con intensidad
este tiempo del amor y hacer del 2.006 el año para
seguir con nuestras realizaciones, como personas y como
comunidad organizada.
¡Feliz Navidad, formoseños y hermanos
de todo el mundo!!!